


1 Que el Señor esté contigo en el día de tu tribulación. ¡Que el Dios de Israel te libre de todo mal!
2 Que desde su santuario te envíe ayuda; que desde Jerusalén te fortalezca.
3 Que recuerde con agrado lo que le has brindado: tus sacrificios y ofrendas quemadas:
4 Que él te conceda lo que tu corazón anhela y haga realidad todos tus planes.
5 Que haya griterío de júbilo cuando sepamos la noticia de tu victoria; que se agiten las banderas en alabanza a Dios por todo lo hecho en favor tuyo. Que él responda a todas tus plegarias.
6 «Dios salve a su ungido rey». ¡Y yo sé que lo salva! Él le escucha desde el alto cielo y lo rescatará con su gran poder.
7 Algunas naciones se vanaglorian de sus ejércitos y armamento; pero nosotros nos gloriamos en el Señor nuestro Dios.
8 Esas naciones caerán y perecerán; nosotros nos alzaremos y permaneceremos firmes y a salvo.
9 Otorga la victoria a nuestro rey, Señor. Escucha nuestra oración.